Imperfección
Decidí abrazar la imperfección porque la perfección me estaba dejando inconcluso.
He decidido abrazar la imperfección no como un fin sino como la consciencia que por más que intente lograr algo perfecto, esto es imposible y solo retrasa la conclusión de lo que me propongo lograr. Me doy por vencido en la búsqueda de lo perfecto, me conformo con que funcione y sea mejor de lo que pude haber hecho ayer.
Buscar la perfección implica constantes revisiones, afinaciones de los detalles de cada detalle y que nada esté lo suficientemente acabado.
La perfección encierra una búsqueda infinita en círculos que son imposibles de romper. Uno queda encerrado en ellos intentando siempre mejorar la materia prima, los conocimientos, las habilidades, la calidad, la textura, los colores, la expresión, el análisis ...
Nada termina siendo perfecto pero si puede ser mejor que un año antes, un mes antes y quizá hasta una semana antes. Eso es lo que busco ahora, hacer las cosas un poco mejor de lo que fueron en el próximo pasado. No siempre resultará así pero al menos iré avanzando sin remordimiento, sin creer que aún no alcanzo la perfección y por ello lo que entrego a la sociedad no sirve para nada.
Buscar la perfección y buscar ser mejor en lo que uno hace no es lo mismo.
Buscar la perfección no nos deja ser libres para considerar las equivocaciones y errores como aprendizaje si no como defectos de personalidad o carácter. Eso inhibe la creatividad y nos aleja más de lo que queremos alcanzar.
Buscar ser mejor es una motivación que nos lleva a aumentar nuestros conocimientos y practicar nuestras habilidades una y otra vez, considerando que estamos en una jornada que nos lleva por valles y montañas en donde equivocarse, cometer errores, son signos de que vamos avanzando, aunque no siempre a la velocidad que quisiéramos pero si con toda nuestra humanidad.
Códice Moncam