La espiral del aprendizaje
Deconstruir, reconocer, entender, construir
Aprender es un proceso que empieza decostruyendo el material objeto de nuestro aprendizaje. Eso es lo que hacen los maestros en la escuela cuando preparan sus clases, deshacen el tema a enseñar en pequeños pedazos que puedan ser comunicados en una clase.
Los pequeños pedazos se convierte en piezas de un rompecabezas que los estudiantes tiene que ir reconociendo y entendiendo para luego con ellas construir la imagen completa de nuevo.
Este no es un proceso secuencial, más bien es circular pues mientras más se profundiza en un tema más se decostruye, reconoce, entiende, construye. Una y otra vez en una espiral que forma remolinos en la mente de los que enseñan y aprenden.
Los libros son un tipo de rompecabezas muy especiales. Los autores de ellos al crearlos, primero descomponen en partes el gran total que será el libro y luego, poco a poco, le van dando forma a cada página agregando los elementos que comunicarán sus ideas como pueden ser palabras e imágenes. Los lectores de esos libros entonces al leerlos, van construyendo las ideas que el autor ha dejado plasmadas en papel, pieza a pieza hasta que crean en su mente la imagen final del rompecabezas que representa para ellos ese libro.
Mucho del proceso de entender algo se realiza con la decostrucción de ello. Saber de que están hechas las cosas, el porqué una idea es presentada de esa manera, que hay dentro de esa caja negra, la motivación del investigador o del científico para intentar entender un obscura fórmula, los componentes de un radio electrónico, la formación de las galaxias ... Todas estas son piezas de algún rompecabezas, unas piezas son muy grandes otras no tanto pero todas forman parte de otros rompecabezas. Cuando aprendemos, estamos adquiriendo piezas de rompecabezas y cuando entendemos algo, hacemos nuestras esas piezas y tenemos entonces la capacidad de construir rompecabezas nuevos con ellas. Quizá algunos resulten ser repetidos, como los que se crean con los libros de texto de las escuelas pero tal vez si coleccionamos un número suficiente de piezas, quizá algunos lleguen a ser originales.
Códice Moncam